porque al impaciente se le olvida la miel del presente

lunes, 6 de enero de 2014

)entre paréntesis(


Normalmente suelo copiar y pegar cosas que he escrito en momentos de "inspiración"... ahora no, estoy sentada en mi silla, con las rodillas dobladas, como siempre, sin saber muy bien qué escribir.
Pero quiero escribir.
Quiero escribir porque me gusta, porque dicen los que me quieren que se me da bien, yo sinceramente no creo que se me de ni bien ni mal, igual plasmo bien sentimientos en cartas de cumpleaños, pero no llego mucho más allá.
Antes de empezar esta entrada le he echado un rápido vistazo a la anterior, no me he fijado en la fecha pero es de hace bastante, la cosa es que sigo un poco igual, sigo parada pero con la idea de moverme.
Por eso es quizás que estoy escribiendo, porque este año me he propuesto "cultivar" mi personalidad, aprender cosas, ver cosas, ser un poco inquieta y dejar de lado las siestas vagas y la tele basura. Pero una vez más esto no viene únicamente de mí, la idea de cultivarme, de recrearme y de llegar a ser feliz por mi misma y no por lo que otros puedan darme me la ha dado mi amiga P... vive fuera del país y la veo bastante bastante menos de lo que me gustaría, pero cuando la veo hace marca, porque me aporta cosas y maneras de ver la vida.
Así que aquí sigo, empezando un párrafo más de un texto que no tiene ningún propósito ni sentido, mientras mi madre cansada me dice que ordene la habitación (una vez más).